
Una rutina con propósito
Un entorno que sana
Una comunidad que transforma
-
Rutinas diarias que restauran
Tiempos de reflexión y desayuno en familia.
Tiempo escolar.
Comida, actividades y recreación.
Cena y descanso.
Los abrazos y las pequeñas responsabilidades también sanan:
lavar platos, doblar ropa, barrer o cuidar su espacio. Participar en el hogar les devuelve dignidad. -
Actividades Educativas y recreativas
Enfoque en el desarrollo integral y valores como parte del día a día.
Robótica, habilidades digitales y carpintería para estimular mente y creatividad.
Música, arte, teatro y danza para expresar emociones y crear comunidad.
Ciudadanía activa: cuidar espacios, ayudar y decidir juntos.
Cada actividad forma personas con herramientas para toda la vida.
-
Enfoque en el desarrollo integral
Atención médica, dental y psicológica
Planes de vida y evaluaciones de progreso
Escucha activa y acompañamiento terapéutico
Formación espiritual y discipulado
Aquí, aprenden a nombrar lo que sienten, sanar con palabras y saber que no están solos.

































